lunes, 21 de abril de 2014

Basamentos Bibliograficos del Espiritismo

La doctrina Espirita tiene sus bases en cinco libro escritos y codificados por Allan Kardec y dictado por Espíritus superiores. Las obras mencionadas son:



               El libro de los espiritus  Descarga Libro
             El libro de los Mediums  Descarga Libro
 El Evangelio segun el espiritismo Descarga Libro
                    El cielo y el infierno Descarga Libro
                                 La genesis  Descarga Libro

Como hemos explicado antes esta doctrina en su base se compone de tres aspectos fundamentales que son.
Ciencia, Filosofía y Moral, cada uno de los cuales esta representado y tratado con uno de estos cinco libros.

El Libro de los Espíritus nos habla acerca de la filosofía de la doctrina.

El Libro de los Mediums nos habla de la parte científica y parte práctica de la doctrina.

El Evangelio según el Espiritismo nos habla enseña las máximas de Jesús que conforman el código Moral de la doctrina.

Una vez presentados los libros que representan a la filosofía, en una sección aparte de este blog Titulada "Estudio del Evangelio según el Espiritismo", encontrara diversas unidades que tratan el estudio de este ultimo libro.





martes, 15 de abril de 2014

Quien fue Allan Kardec

Quien fue realmente este personaje ilustre, fundador de la doctrina espirita y que sus actos y aportes lo perpetuaron en la historia como el gran codificador de la doctrina de los espíritus.
Mucho sabemos espiritismo y sus postulados, en el post anterior titulado “Que es el espiritismo?” vimos como seria el inicio de esta doctrina. Veamos ahora un poco de la vida del iniciador de la misma.



El 3 de octubre de 1804, nacía en Lyon, Francia, Hipollite Leon Denizard Rivail, hijo de  Jean Baptiste-Antoine Rivail, magistrado y juez, y Jeanne Duhamel.
Desde niño hizo sus primeros estudios en Lyon y los completó en Yverdum, Suiza, en el Instituto del celebre profesor Pestalozzi, conocido por ser uno de los más respetados centros de enseñanza de toda Europa, y por donde pasaron famosos intelectuales de aquella época. Fue aquí que se reveló como un discípulo brillante en Ciencias y Letras.
Se entrego a fondo a la lingüística y hablaba correctamente el alemán, el inglés, el español y el holandés. Vuelto a París hacia 1824 funda allí un Instituto de Enseñanza semejante al de Yverdum. Y como educador publica numerosos libros, gracias a los cuales, a pesar de verse arruinado por problemas familiares, consigue sobrevivir económicamente. Daba también clases de química, física, astronomía y anatomía comparada.
En 1832 contrajo matrimonio con la institutriz Amelia Boudet, nueve años mayor que él, y fue en este periodo de su vida cuando elaboró y publicó los siguientes libros:

1828: Plan propuesto para el mejoramiento de la instrucción pública.
1829: Curso práctico y teórico de Aritmética, según el Método de Pestalozzi, con modificaciones.
1831: Gramática francesa clásica.
1846: Manual de los exámenes para los diplomas de capacidad.
1848: Catecismo gramatical de la lengua francesa.

Un segundo periodo biográfico comenzó para Rivail cuando, en 1854, con 50 años, oye hablar por primera vez del fenómeno de las mesas giratorias. Fue su viejo amigo Fortier el que le dijo..."He aquí una cosa extraordinaria, no solamente se hace girar la mesa, magnetizándola, sino que se le hace hablar: se interroga y ella contesta.".  Nuestro codificador contestó... "Yo creeré en ello cuando lo vea y se me haya probado que una mesa tiene cerebro para pensar, nervios para sentir, y que puede convertirse en sonámbula. Hasta entonces permitidme que no vea en ello mas que un cuento de niños ."                               
Al principio de 1855, encontró a Carlotti , otro viejo amigo, que vuelve a relatarle fenómenos, y a sugerir el hecho de que pudieran estar provocados por espíritus, lo que despierta su irresistible curiosidad de estudioso e investigador. En Mayo de 1855, acompañado de Fortier, visita la casa de una conocida sensitiva , Madame Roger .               
Allí mantiene una conversación con diversas personas que le redundaron en la idea antes sugerida por Carlotti. Esta reunión le causa honda huella y en allí mismo es ya convidado a asistir a una sesión de experiencias. Cuando sale dice..."fue allí, donde por primera vez puedo dar testimonio del fenómeno de las mesas giratorias, que saltaban y corrían, en condiciones tales que la duda no era posible. Allí vi también algunos ensayos imperfectos de escritura mediúmnica". 
Todavía escéptico, pero impresionado, traba amistad con la familia Baudin , a cuyas reuniones es invitado y asiste.
En 1855 recibe de Carlotti y de un grupo de estudiosos 50 cuadernos conteniendo relatos de experiencias y comunicaciones diversas, pidiéndole que analice y ordene el contenido. Una noche, en una de las sesiones en casa de Baudin, recibe una comunicación de su espíritu protector. Éste, nombrado como Espíritu de la Verdad, le revela que en  una anterior encarnación con los druidas en la Galia su nombre fue Allan Kardec.
También le comunica su ayuda en la importante tarea para la que había sido destinado. A partir de este momento Allan Kardec se lanza al trabajo, recibiendo instrucciones a través de diferentes médiums como Japhet, Croset, Dufaux, Aline, hermanas Baudin, entre otros, diversificando de este modo los intermediarios de su comunicación con los espíritus, para mejor contrastar la verdad.
El 18 de Abril de 1857 publica un libro que marcará el inicio del espiritismo. Sale a la luz de este modo " El Libro de los Espíritus". Este libro ya aparece firmado con el nombre Allan Kardec, apartando así la época de escritor y pedagogo prestigioso que firmaba con el de su nacimiento. En los pocos años que le quedaban ya por vivir. escribió todos los libros que completan la codificación espirita y completo el primero.
En 1858 editó la Revue Spirite (Revista Espírita). En 1861 publica El Libro de los Médiums. Su texto comprueba el carácter científico de la Doctrina Espírita, y provoca un gran revuelo y el catolicismo se levanta contra Allan Kardec. Ese mismo año 300 libros espíritas son quemados en Barcelona por la inquisición española. Tiempo después, al respecto de este hecho, Kardec recibió, a través de un médium, el siguiente mensaje del obispo de Barcelona, autor del acto de fe que decretó la incineración de los libros, y que ya había desencarnado: "Esta escrito. Tu quemaste las ideas y las ideas te quemaron. Rogad por mí; rogad, porque es agradable a Dios la oración del perseguido para con su perseguidor. Habla el que fue obispo y ahora no es mas que penitente".                                 
En 1864 publica El Evangelio según el Espiritismo. En 1865 publica El Cielo y el Infierno. En 1868 publica La Génesis.

Allan Kardec desencarna el  31 de marzo de 1869, a los 64 años, a consecuencia de un aneurisma. Su cuerpo está sepultado en el cementerio Père-Lachaise, en la capital francesa. En su tumba, una inscripción resume la filosofía espírita: “Nacer, morir, renacer una vez más y progresar siempre. Tal es la ley”. Algunos de sus amigos reunieron textos inéditos y anotaciones de Allan Kardec en el libro Obras Póstumas, publicado en 1890. 

domingo, 13 de abril de 2014

Que es el espiritismo?



Allá por el año 1848, en Estados Unidos de América, llamaron la atención diversos fenómenos extraños, que consistían en ruidos, golpes y movimientos de objetos sin causa conocida. Esos fenómenos ocurrían a menudo en forma espontánea, con una intensidad y una persistencia singulares. Pero también se observó que se producían más particularmente
bajo la influencia de determinadas personas, a las que se designó con el nombre de médiums,  quienes en cierto modo podían provocarlos a voluntad, lo cual permitió repetir las experiencias.
Para eso se servían, sobre todo, de mesas. No porque ese objeto fuera más adecuado que otro, sino tan sólo porque es movible, resulta más cómodo, y nos sentamos más fácilmente y con mayor naturalidad alrededor de una mesa que frente a cualquier otro mueble. Se obtuvo de esa manera la rotación de la mesa, luego movimientos en todas las direcciones, temblores, vuelcos, levitaciones, golpes violentos, etcétera. Este fenómeno fue designado, en los comienzos, con el nombre de mesas giratorias o
danza de las mesas.
Hasta allí el fenómeno podía explicarse perfectamente mediante una corriente eléctrica o magnética, o por la acción de un fluido desconocido. Esa fue, en efecto, la primera opinión que se generó acerca de él. Con todo,
no se tardó en reconocer, en esos fenómenos, la presencia de efectos inteligentes.
A partir de entonces fue evidente que la causa no era puramente física,
y de acuerdo con el axioma según el cual: si todo efecto tiene una causa, todo efecto inteligente debe tener una causa inteligente, se llegó a la
conclusión de que la causa de ese fenómeno tenía que ser una inteligencia.
Por consiguiente, esa inteligencia sólo podía pertenecer a un ser invisible
El medio de asegurarse de ello era muy simple: consistía en entablar una conversación con ese ser, lo que se hizo mediante un número convenido de golpes, que significaban o no, o que designaban las letras del alfabeto.
El fenómeno fue denominado mesas parlantes
Todos los seres que se comunicaron de ese modo, al ser interrogados
acerca de su naturaleza, declararon ser Espíritus y pertenecer al mundo invisible.
Las comunicaciones a través de golpes eran lentas e incompletas. Se descubrió que, al adaptar un lápiz a un objeto movible –una cestilla, una tablita o cualquier otro objeto sobre el cual fuera posible apoyar los dedos– dicho objeto se ponía en movimiento y trazaba caracteres. Más tarde se observó que tales objetos sólo eran accesorios, de los que se podía prescindir.  
La experiencia demostró que el Espíritu, así como ejercía una acción sobre
un cuerpo inerte para dirigirlo conforme a su voluntad, podía actuar también sobre el brazo o la mano para guiar el lápiz. Entonces surgieron
los médiums escribientes, es decir, las personas que escriben de manera involuntaria bajo el impulso de los Espíritus, de los cuales pasan a ser instrumentos e intérpretes.
Pronto se supo, por intermedio de ellos mismos, que no son seres aparte en la creación, sino las almas mismas de los que vivieron en la Tierra o en otros mundos. Se supo que esas almas, tras haberse despojado de su envoltura corporal, pueblan y recorren el espacio.

Por lo general, se tiene de los Espíritus una idea completamente falsa. No son –como muchos se lo imaginan– seres abstractos, difusos e indefinidos, ni algo así como un resplandor o una chispa. Se trata, por el contrario, de
seres muy reales, que poseen su individualidad y una forma determinada.
En el hombre hay tres partes esenciales:
1.º) El alma o Espíritu, principio inteligente en el que residen el pensamiento, la voluntad y el sentido moral; 2.º) el cuerpo, envoltura material, pesada y densa, que pone al Espíritu en relación con el mundo exterior; 3.º) el periespíritu, envoltura fluidica, ligera, que sirve de lazo y de intermediario entre el Espíritu y el cuerpo. Cuando la envoltura exterior está gastada y ya no puede funcionar, deja de vivir. Entonces el Espíritu se despoja de ella, como el fruto de su cáscara y el árbol de su corteza; en una palabra, de la misma manera que descartamos un traje viejo que no nos sirve más. Esto es lo que se denomina muerte.
Entre las comunicaciones impartidas por los Espíritus, algunas son sublimes por su profundidad y elocuencia, por su sabiduría y moral, y sólo
reflejan la bondad y la benevolencia. Pero otras son muy vulgares, frívolas, triviales e incluso groseras, y a través de ellas el Espíritu revela los
instintos más perversos. Dado que los Espíritus no son otra cosa que las almas de los hombres, no pueden, naturalmente, volverse perfectos al dejar su cuerpo. Hasta tanto hayan progresado, conservarán las imperfecciones de  la vida corporal. Por esa razón hay Espíritus de todos los grados de bondad y maldad, de sabiduría e ignorancia.

Las instrucciones impartidas por los Espíritus de un orden elevado, acerca de los temas que interesan a la humanidad, así como las respuestas que han dado a las preguntas que se les formularon y que han sido recopiladas
y coordinadas cuidadosamente, constituyen toda una ciencia, una doctrina moral y filosófica que lleva el nombre de espiritismo.
Por consiguiente, el espiritismo es la doctrina basada en la existencia, las manifestaciones y la enseñanza de los Espíritus.
En resumen, el espiritismo alivia la amargura de los pesares de la vida, calma la desesperación y las inquietudes del alma, disipa la incertidumbre o el terror acerca del porvenir, aleja la idea de abreviar la vida mediante
el suicidio. Por eso mismo hace dichosos a los que se compenetran con él, y ahí radica el gran secreto de su rápida propagación.
Desde el punto de vista religioso, el espiritismo se basa en las verdades fundamentales de todas las religiones: Dios, el alma, la inmortalidad,
las penas y las recompensas futuras.
Con todo, es independiente de cualquier culto en particular. Su objetivo consiste en probar, a los que niegan o dudan, que el alma existe y sobrevive al cuerpo, y que después de la muerte sufre las consecuencias del bien y del mal que ha cometido durante la vida corporal
En calidad de moral, el espiritismo es esencialmente cristiano, porque la que enseña no es sino el desarrollo y la aplicación de la moral de Cristo, la más pura de todas, y cuya superioridad nadie discute: prueba evidente de
que es la ley de Dios. Esta moral es para uso del mundo entero.
El espiritismo es independiente de toda forma de culto, no prescribe ninguno de ellos ni se ocupa de dogmas particulares, razón por la cual no constituye una religión especial, pues tampoco tiene sacerdotes ni templos.
A quienes le preguntan si hacen bien al seguir tal o cual práctica, responde: “Si creéis que es una obligación para vuestra conciencia, hacedlo: Dios siempre toma en cuenta la intención”.
En una palabra: el espiritismo no se impone a nadie.
Por lo antedicho se debe ver al espiritismo desde tres aspectos diferentes a saber:

El aspecto científico, consiste en las relaciones que se pueden establecer con los espíritus,  comprende la fenomenología mediúmnica, las investigaciones experimentaciones y comprobaciones, la demostración de la realidad espiritual, la aplicación del método científico y la determinación de las leyes que rigen los fenómenos psíquicos y espirituales.

El aspecto filosófico, comprende todas las consecuencias morales que se desprenden de semejantes relaciones. Comprende el conjunto de explicaciones y respuestas que el espiritismo da ante los grandes interrogantes básicos e históricos de la humanidad: Dios, Universo, el hombre, el alma, la vida, el amor, el dolor, la verdad, el bien y el mal, los orígenes, las finalidades, el destino, etc.

El aspecto ético o moral, se fundamenta en las enseñanzas y en la ejemplificación vivenciada, dadas por el Maestro Jesús a la humanidad como código de moral por excelencia de aplicación universal en el ámbito personal, familiar y social.

El encargado de llevar a delante la constitución y difusión de esta doctrina fue Allan Kardec, filosofo y científico de origen francés, quien tuvo a su cargo la codificación de toda la doctrina espirita que plasmo en cinco libros fundamentales que son:
El libro de los espiritus, El libro de los mediums, El evangelio segun el espirtismo, El cielo y el infierno y el libro de Genesis. 
Es a partir de Kardec y sus libros que la doctrina se empieza a difundir no solo en francia sino también a nivel mundial, comenzando una nueva era y revolución tanto en el mundo material como espiritual. 


Fuentes: El espiritismo en su mas simple expresion, Allan Kardec
             El libro de los espiritus, Allan Kardec